Soy el hijo del destino
A los golpes de martillo
En el yunque de acero
Me forje
Bajo la mirada
Y guía de mi padre
Que nunca dejó de sonreír
Y darme un consejo
Como es la vida
Y como tengo
Comportarme
Y caminar por el
Sin más
Desde niño
Me enseñó a trabajar
Llevarme el pan
Ganarme
Con mi esfuerzo propio
Me decía
Mi padre
No hay cosa más linda
Y placentera
Ganarse el pan
Con el sudor de la frente
Ganarse el respeto de los demás
Siendo honrados
Y respetuoso
Extendiendo la mano
A quien necesita
Que se le ayuda
Porque la vida
Da las vueltas
Cuando menos pensamos
Aquel
Que hoy necesita
Y le das la ayuda
De el
Posiblemente necesitaras mañana
Y él
Te ayude.
Nemo
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