miércoles, 30 de junio de 2021

LOS VIEJOS

Envejecidos desde un puesto burocrático, convertidos en enemigos de los que van a viejos: dictan leyes y reglamentos; para declararlos inútiles.

Reclutan a jóvenes, formados en las escuelas de la fantasía: sin moral y sin ética, que los convierten en sus testaferros, que segados por la ambición y la avaricia de riqueza fácil, se prestan;   para cometer los robos al erario nacional.

¿A quien rinden cuentas de sus actos? ¿Quiénes son los que se están beneficiándose?

¿A quiénes protegen?

Al final, quienes están de tras de toda, esta tragedia: robos y crímenes, acaso los mismos que en estos cuarenta años de democracia corrupta y perversa han llevado a un país, a una de las peores crisis de corrupción, que no saldremos de ella; en dos y tres generaciones, si no somos capaces de llevar ante los tribunales de justicia a los principales responsables, que se escudan tras los partidos políticos, y un ejércitos de jueces, fiscales, asambleístas, que han venido haciendo leyes, con las cuales se garantiza su impunidad.

Vemos, como en el pueblo, más lejano; donde existen una alcaldía, una prefectura, se hacen elegir de una manera legal o fraudulenta, en cuatro años;  conocemos como se hacen de bienes: haciendas, mansiones, carros último modelo, departamentos en las capitales de provincia o la misma capital.

Jueces y fiscales, son testigos, auditores de la contraloría, que van hacer fiscalización, sus  informes siempre salen positivos, inclusivo les dan diplomas de honestidad y eficiencia, sus bolsillos salen llenos de dólares mal habidos.

Las obras públicas construidas de  estos gobiernos seccionales, generalmente son con sobre precios y de mala calidad, por el pago de comisiones: 15  y 30 por ciento.

Las obras por administración directa, en acuerdos con los proveedores, siempre tienen sobreprecios de la cual tienen que repartir con los concejales, fiscalizador,  pagador, y en mucho de los casos, hasta con el conserje.

Quiénes les financian las campañas a estos magos, que todo lo que toca, se convierte en dólares y bienes materiales: contratista, proveedores de materiales, empleados de la misma institución, que promueven a los candidatos, ofreciendo obras a los electores.

Donde ha llegado las instituciones públicas de descomposición (juzgados, cortes, contraloría, defensoría del pueblo), habrá que preguntar que no está contaminado por la corrupción, en la mayoría de los casos, es gracias a esos grupos mafiosos, que están tras los escritorios: 20  y 40 años, y luego de jubilarse, se quedan de asesores y no permite que lleguen nuevas gentes; siempre tiene que ser un pariente o amigo íntimo, conocedor sus fechorías.

A la gente honrada y eficiente, sino entra a sus juegos sucios,  claro que lo excluyen, y hacen lo despidan; cuando llegan los nuevos jefes.

Nosotros como sociedad civil, estamos desprotegidos por el estado,  no es buen para nuestros niños, nuestra juventud.

El silencio de la gente buena, se escucha como un grito de desesperación y agonía, en sus miradas, en su tono de voz

Mientras los viejos, los viejos privilegiados, que no envejecen y siguen asesorando a los gobiernos que llega, con dos tres sueldos de jubilados; seguirán pariendo la corrupción, y el pueblo: sin rumbo, ni futuro, que no sea la pobreza, y la migración.  

Nemo Domínguez Mejía

martes, 15 de junio de 2021

ECUADOR DE LUTO

 En qué momento, el respeto perdimos a la vida de los seres humanos: el irrespeto a la propiedad privada y pública.

Hoy en día, nuestras vidas no están seguras, ni en nuestros propios hogares; cuando acudimos a la fuerza pública, ella, llegan muchas veces; cuando es demasiado tarde, o nunca llegan, para poder auxiliar a los indefensos ciudadanos, frente al ataque de la delincuencia.

No podemos negar, que más son los buenos ciudadanos de uniforme que  están dispuestos a dar la vida por el cumplimiento de su deber; pero también tenemos de los malos ciudadanos, de los corruptos, que han hecho del uniforme, que el estado, les entregan; para hacer cumplir la ley, pretenden utilizar para hacer dinero fácil.

Mientras los gritos de agonía, sin consuelo, retumba en los cielos y las conciencias mirando como asesinan, o roban quienes deberían dar el ejemplos de ciudadanos honestos y respetuosos de la ley; pero lamentablemente los hacedores de la justicia, los que deberían hacer cumplir, con sus sentencias que permiten que muchos de los delincuentes de cuello blanco, les permiten que se fuguen, otros paguen penas que nada tienen que ver con la gravedad de los hechos, y muchos de los casos por no tener ni para pagar un abogado que lo defienda, tiene que mantenerse en la cárcel, permitiendo que su familia viva en el completo desamparo.

Hoy en día, no nos asombra, ni nos causa novedad, que de pronto lleguen a nuestros barrios un borracho sobre un volante, pase atropellando, destruya la propiedad privad, o mata, esto no es ninguna novedad, y los afectados ciudadanos, acudamos a las autoridades pertinentes y mejor somos maltratados, inclusive amenazados; teniendo que darnos media vuelto: cargar al muerto enterrar y a la viuda y los hijos, darles el sentido pésame y decirlos que cuanto lamentamos la desgracia, hasta ahí llega todo.

Mientras tanto los asesinos del volante, los delincuentes, siguen sembrando terror, en los barrios y las calles de la ciudad y el país. Quienes son los responsables de todo, este caos que estamos viviendo,  y enlutando a familias enteras. Allí están los responsables; desde el mismo estado, que ha permitido crezca, hasta que hoy, se ha vuelto incontrolable; mientras la corrupción y la impunidad,  celebra su triunfo,  ante el fracaso de una justicia lenta, e incompetente; quienes para muchos creemos, son los principal responsable de todo cuanto estamos viviendo, por no ser oportuna y eficiente, ante la delincuencia.

Los ciudadanos comunes.

¿Preguntarles a la justicia, a los de la fuerza pública, a los asambleístas?

La gente del pueblo no estamos en condiciones de contratar: guardaespaldas, policía privada, comprar carros blindados, y no tenemos  de parte a la justicia.

¡Cómo nos protegemos de la delincuencia!

Si acudimos a la ley, ella no actúa, en mucho de los casos; porque no tenemos las pruebas suficientes, el delincuente, seda media vuelta, y nos amenaza, que pronto nos visitara en nuestros hogares.

Ni siquiera se ha terminado, el luto, ya están enterrando a otro muerto, el luto nunca termina de nuestro pueblo.

Señor Presidente, devuélvanos: el país de paz y oportunidades, que la estamos perdiendo.

Nemo Domínguez Mejía. 

viernes, 11 de junio de 2021

VUELA

 Poeta encantada

Por los versos de luz

Con las alas de la poesía

Por los cielos

 

Haciendo de la noche

Y del día

De las estrellas

La luna

 

La semilla del amor

Que brota del corazón

La pasión

Queda la vida

 

A la luz

A las sombras

Al viento

Convirtiéndolos

 

En la música celestial

Que cautiva al alma

Y los sentimientos

De los amantes

 

Que se pierden

En el vuelo

Sin retorno

En busca de sus destinos

 

Cuando sus almas

Vuelan

Llevadas

Por las alas del amor.

Nemo

QUITO

 Con rostro de ruralidad: soñador, emprendedor, aventurero; cuerpo famélico, espíritu, habido: equidad, seguridad, justicia y oportunidad de vivir con dignidad.

Mirando; desde un mirador de los tantos, que tiene, esta bella ciudad que cada día crece; como un enjambre,  sin descanso: nuevas ciudadelas con grandes edificios, viviendas con jardines; parques con lagos e islas de fantasía, y autopista iluminadas.

No contrasta,  con el otro rostro que refleja una realidad distinta; donde acuden los políticos, mirando la iniquidad como viven, se alarman de tanta pobreza, no creen que la gente vivan en tan deplorables situaciones: barrios sin obras básicas, que nacieron por las necesidades e iniciativas propias de las nuevas familias, que se van formando, ante la desidia e irresponsabilidad de las autoridades de turno, que tiene: el deber y responsabilidad de velar por la seguridad y bienestar de los ciudadanos; en base a una planificada de acuerdo a la demanda de su crecimiento poblacional.

Eso no sucede de parte del  Gobierno Seccional, que los funcionarios de elección popular,  están pendiente en programas y planes de vivienda; donde puedan hacer sus grandes negociados; no cumplen con su labor fiscalizadora de los grandes proyectos que emprenden, con sobre precios, solo es retórica discursiva de campaña electoral; cuando, forman inmediatamente del club de los que miran y con sus silencio, viene el acomodo económico.

Así, vemos cómo pasa el tiempo de cada nueva administración, y los problemas de quienes los eligieron siguen aumentando: pobreza por falta de creación de nuevas fuentes de trabajo, obras inconclusas  con sobre precios y mal hechas; funcionarios de las administraciones, convertidos en cómplices de sus jefes de turno,  que se encargan de desinformar, e inclusive los amenazan con declararlos personas no grata para las instituciones; claro eso significa que durante su periodo no puedan recibir obras, o los legalicen sus barrios que son los grandes pretextos.

Claro el otro pretexto es que no hay dólares para nuevas obras, luego aparecen en los noticieros públicos y privados, los grandes negociados por los sobreprecios en las monumentales, contrataciones públicas; donde están involucrados: Alcaldes concejales, hasta el mandatario del gobierno nacional,  contralor de la nación.

Sin embargo para resolver las demandas básicas que diariamente vive el pueblo, no hay recursos económicos, y nos tienen peleando a la gente de los barrios, con los dirigentes y autoridades, mientras los vividores del negocio de la política, están disfrutando de los millones robados, con  sus mansiones privadas y viajes de placer por el mundo.

Esperando las nuevas elecciones, el pueblo se haya olvidado, y vuelven con todo el cinismo utilizando testaferros de los empleados, que por algún barrio hizo una obra y se ha constituido en una deuda de nunca acabar, pidiéndoles el voto; para que su patrón lo vuelvan elegir.

La tragedia que vive la ciudad y el país, nunca se podrá acabar, mientras los tengamos autoridades en los gobiernos; comprometidas con los actos de corrupción y no tengamos autoridades de la justicia que los manden a las cárceles y los obliguen a devolver lo robado y nunca más puedan ocupar un puesto público.

Dios salve nuestras almas; porque el hambre y la pobreza, solo lo resolveremos, no eligiendo a quienes nos han robado: a nombre de la democracia, la estabilidad y paz social.

Nemo Domínguez Mejía

  EL ECUADOR Quizá, debe ser unos de los pocos países en el mundo; donde la clase política, no forma estadistas para gobernar su estado, s...