No es justicia, cuando actúa frente a un irresponsable, incompetente y corrupto alcalde de una ciudad; reconocida, “Patrimonio Cultural de la Humanidad, por la UNESCA, el máximo organismo internacional de la cultura del planeta, se presenta: tardía, timorata y cobarde.
Cuando sabemos, que hubo muertos, y siguen
habiendo muertos en la ciudad, por una clara e irresponsable negligencia y corrupta
actuación del máximo representante de la
ciudadanía, en esta ciudad, que justamente lo eligió; para que velara por su integridad,
seguridad y bienestar de su puebLo.
Y este ciudadano Alcalde, es médico, con mucha
razón; moral y éticamente, no está acto para desempeñar dicho cargo y los
concejales que forman de este cabildo, deberían en el concejo en pleno, pedirle
la renuncia por sanidad pública, y de no hacerlo, destituirlo.
La ciudadanía por nuestra parte, debemos actuar
con celeridad y severidad en la recolecciones de las firmas; para en las urnas,
también manifestemos nuestro total rechazo, con nuestro voto, y revocar su
mandato.
De no hacerlo, volverá a suceder, lo que ya
lo hicieron concejales que siguieron actuando con grilletes en los tobillos, en
los pies en el concejo, e inclusive han sido sancionados con prisión y pago de
multas millonarias; nuestro total rechazo, aquellos que no actúan pensando en
la moral pública que deben cortar de una vez por todas.
Pedimos la revocatoria del mandato del
Alcalde, vamos a recolectar las firmas y sean en las urnas los ciudadanos los destituyan ,
si los señores concejales, no actúan, con su silencio se están volviendo cómplices
de los actos de corrupción del ciudadano Alcalde, que sus actuaciones, son
actos de criminales, que se puede considerar, crímenes lesa humanidad; que en
plena pandemia, hayan actuado de esta manera.
Sabemos la irresponsable y lenta actuación de
los organismos de control, allí dormirá el sueño del olvido; como es el caso
de la, la ruta viva, la construcción del metro, y lo más lamentable
los actos de robo; somos nosotros los contribuyentes, tenemos que pagar vías nuevos
impuestos, a través de los impuestos prediales, y para paralización de las
obras de servicios básicos en los sectores marginales de la ciudad, recorte de
los presupuestos, todo por las actuaciones irresponsables de muchos
funcionarios públicos, que hoy vemos con orden de presión.
Esto ha traído como consecuencia que la
ciudad se encuentra en indefensión, frente a la delincuencia rampante, e incontrolable:
robos, asaltos, venta de droga, una economía paralizada por lenta o nada actuación;
para buscar pronto combatir esta pandemia, que nos está matando.
Nemo
Domínguez Mejía
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